Según las estadísticas, el miedo al dolor es uno de los principales frenos que podemos llegar a experimentar cuando acudimos a la consulta de nuestro dentista. Y es que pensamos que cualquier técnica que pueda ser aplicada por el odontólogo nos generará mucho dolor.
Además, también hay que considerar que existen algunas personas que tienen una sensibilidad mayor en la boca, o bien piensan demasiado en ello, lo que hace que ellas mismas se machaquen psicológicamente.
Para poder llevar a cabo este tipo de técnica se necesita de un médico especializado en el área de la anestesia, un anestesiólogo. En nuestra clínica odontológica tenemos a un profesional autorizado que cuenta con muchos años de experiencia a sus espaldas. Se especializa tanto en el tratamiento odontológico de cara tanto a los adultos, así como en diferentes pacientes pediátricos.
¿Para qué tipo de persona se recomienda la sedación consciente?
En los últimos años hemos podido ver cómo la tecnología odontológica ha evolucionado a un ritmo bastante intenso, pudiéndose encontrar con un tipo de aparatología dental poco agresiva y muy funcional. Por esta razón, se han reducido mucho los casos en los que el paciente puede tener miedo a la consulta del dentista.
Sin embargo, en el caso de que estemos hablando de tratamientos dentales muy largos, puede que tanto los niños con los adultos, no puedan aguantar tanto tiempo en este tipo de situación. Es por esta razón, por lo que se recurre a la técnica de la sedación consciente.
Este tipo de sedación también suele ser muy requerida por los padres de aquellos pacientes que pueden experimentar cierta discapacidad. Gracias a la técnica de la sedación se le puede tratar sin que la situación se puede dejar a agravar.
La sedación que se suele llevar a cabo puede ser de carácter intravenosa o indagatoria, no necesitando la intubación del paciente. De esta manera, el mismo no tendrá ningún tipo de problema para respirar, o para conservar algunos de sus reflejos como el de la tos.
Lo cierto es que para realizar la sedación consciente no hay un peso mínimo a considerar, pero sí que es cierto que el profesional anestesiólogo debe de saber exactamente su peso para poder calcular la dosis exacta que necesita para que la persona esté sedosa durante todo el proceso.
Esta técnica es mínimamente intrusiva de cara al paciente, no teniendo consecuencias a largo plazo ni para los adultos, ni para los niños. Los fármacos que se administran en el organismo serán disueltos en el plazo de 4-6 horas.
Ante cualquier duda sobre este tipo de técnica, nuestros profesionales dentistas estarán encantados de echarte una mano.